¿Cree el cliente que su almacén es suficientemente seguro?

El modo en que se asegura su parque de autoalmacenamiento desempeña un papel cada vez más importante en la decisión de un cliente de utilizar su centro. Por supuesto, es muy posible que crea que su almacén es lo suficientemente seguro. Lo importante, sin embargo, es que el cliente en particular sienta que sus objetos almacenados están en buenas manos con usted. De lo contrario, no hay trato. Y eso es lo último que quieres…

Autoalmacenamiento seguro

Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que si no se invierte en seguridad, no se puede ofrecer un local de self-storage atractivo. Al fin y al cabo, nadie quiere alquilar un espacio en el que se sospecha que hay muchas posibilidades de que las posesiones guardadas en los contenedores de almacenamiento sufran daños o sean robadas. Así que es sencillo: cuanta más protección pueda ofrecer, antes querrán los clientes hacer negocios con usted. Y lo más probable es que los posibles ladrones o vándalos abandonen su ubicación y busquen otro objetivo.

Perspectiva del cliente

Antes de elegir los componentes de seguridad que desea utilizar, es útil ver la situación a través de los ojos de un cliente. Y desde el momento en que aparece por primera vez frente a la entrada de su local. A continuación, repase todos los pasos que puede dar el cliente. Hasta que vuelva a salir del recinto.

En la entrada

Cuando un cliente se acerca a su almacén, debe ver una valla bien visible. Esta valla debe rodear todo el recinto y no debe ser fácil trepar por ella. Al fin y al cabo, una valla de este tipo constituye su primera línea de defensa. Si su parque funciona en una zona por la que no pasa mucha gente continuamente, se recomienda un sistema de alarma con detector de movimiento. Puede conectarse al sistema de alarma de la oficina y equiparse con monitores. También puede ser inteligente instalar sirenas exteriores. Se activan cuando se detecta actividad cerca de la valla.

Control de acceso

La entrada debe consistir en un portón de acceso accionado electrónicamente. Si su almacén permanece abierto fuera del horario comercial habitual, es imprescindible contar con un sistema de control de accesos. Al fin y al cabo, una puerta de entrada automatizada le permite controlar a quién y cuándo permite el acceso.

Existen varios sistemas en el mercado. Un teclado digital en el que el cliente introduce un código único es el sistema más básico. También es posible incorporar un interfono y cámaras a un teclado de este tipo. Así, los clientes pueden obtener ayuda rápidamente, si la necesitan, incluso fuera del horario de oficina. De este modo, la persona que responde a la llamada puede ver a su interlocutor.

En algunos casos, los clientes pueden abrir fácilmente la puerta con una tarjeta o una aplicación móvil en su teléfono. O escaneando su huella dactilar en un lector biométrico. También es posible que la cámara de la puerta lea la matrícula del coche del inquilino y le permita el acceso de esa forma. Sea cual sea la opción que elija, a los usuarios les gustará que utilice un método de acceso seguro y fácil de usar.

Cámaras

Cuando los clientes atraviesen la entrada, deberán pasar por una cámara bien visible. Debe tener una resolución lo suficientemente alta como para captar una imagen clara del conductor, el tipo de vehículo y la matrícula.

Hasta aquí la entrada. Pero, por supuesto, aún queda mucho por hacer. La próxima vez: dentro del recinto.

Fuente: insideselfstorage.com